El plan de cuidados de nuestros pacientes tendrá que contemplar la planificación de unos cuidados que no se derivan exclusivamente de los diagnósticos identificados. Cualquier paciente puede presentar problemas como consecuencia de su enfermedad y/o las pruebas diagnósticas o tratamientos (médicos, quirúrgicos etc...), que podemos prevenir, resolver o reducir. Así pues en las actuaciones interdependientes (o dimensión interdependiente, corno la denomina Carpenito), las enfermeras colaboran con otro profesional en la prevención, resolución, o reducción de un problema que de llegar a presentarse derivaría un tratamiento en el que la enfermera actuaría bajo la responsabilidad directa del profesional que lo prescribe (dimensión dependiente).

Veamos unos ejemplos de complicaciones potenciales: Un paciente ingresado para ser sometido a un tratamiento médico de quimioterapia, con una prescripción de mantenimiento de vía permeable tiene una complicación potencial de flebitis.

Un paciente que ha sido intervenido quirúrgicamente, tiene una complicación potencial de íleo paralítico relacionado con la inmovilidad, la anestesia y la analgesia si existe dolor.

Un paciente con un diagnóstico médico de tromboflebitis tiene una complicación potencial de tromboembolismo relacionado con el desalojo del trombo.

Un paciente ingresado con un diagnóstico médico de anemia severa, tiene una complicación potencial de hipoxemia relacionado con la disminución en la capacidad del transporte de oxigeno en los glóbulos rojos.

Todas estas complicaciones potenciales pueden evolucionar negativamente para el paciente y convertirse en un problema interdependiente. La enfermera actuando sobre las complicaciones potenciales puede prevenir en muchos casos la evolución de éstas hacia los mencionados problemas.

Fuente: Docstoc (COM)

0 comentarios:

Publicar un comentario

 
Top